Comentario realizado por :
Silvia Cervera, Cristina Chaparro y Estela Martí
Pinchando en el título podrás ver la presentación que han preparado las alumnas. Recuerda que hay apartados que no están presentados en su forma definitiva ( por ejemplo, el comentario de la MODALIZACIÓN, en el que nos ofrecen un listado con los principales fenómenos pero sin su redacción definitiva, que deberías realizar tú)
ESPAÑA NO CUIDA A SUS CIENTÍFICOS
Aquí os dejo el texto :
España
no cuida a sus científicos
Rosario
G. Gómez
Precariedad,
inestabilidad y austeridad definen el estado de la ciencia en España.
Pocas veces como durante esta crisis los investigadores se habían
visto obligados al exilio para sobrevivir. Muchos han hecho las
maletas huyendo de contratos eventuales y mal pagados y empujados por
el recorte de las becas. El tijeretazo en el presupuesto de I+D ha
pintado un negro horizonte. Los datos de la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económico sostienen que en solo una
década casi se ha duplicado el número de españoles con alta
cualificación que se han instalado fuera, especialmente en Estados
Unidos, Francia y Reino Unido. Son los migrantes de bata blanca.
Contrariamente
a lo que afirmaba el presidente del Consejo Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC), Emilio Lora-Tamayo, la fuga de
cerebros no es una leyenda urbana. El
biólogo madrileño Ciro Cabal es un buen ejemplo de las dificultades
con las que se topan a diario los científicos. Tiene 33 años y en
los últimos cinco a duras penas ha conseguido trabajar en su campo
(biología vegetal y ecología). Y siempre sin contrato. Sus
cotizaciones en la Seguridad Social son frutos de empleos en el
sector de la hostelería. Una tras otra ha visto cómo la decena de
solicitudes para obtener una beca en instituciones públicas o
privadas han sido inútiles y frustrantes. Sin embargo, probó suerte
fuera de España y en poco tiempo ha recibido la invitación de dos
universidades de Estados Unidos, una de ellas Princeton, que en el
campo de la biología es como “el Real Madrid en el mundo del
fútbol”, según Cabal. Allí pasará, entre probetas y enfundado
en la bata de científico, los próximos cinco años.
La
fuga de cerebros (el exministro de Educación José Ignacio Wert la
llamaría movilidad internacional) es un mal negocio para cualquier
país. El sistema educativo español —nutrido mayoritariamente con
fondos públicos— invierte mucho dinero en la formación de
investigadores que, si se ven obligados a migrar por falta de
oportunidades, revertirán en otro país. No es lo mismo ampliar en
el extranjero el adiestramiento en cualquier disciplina que formar
parte de una diáspora impulsada por la falta de proyectos, como ha
ocurrido con los miles de científicos que en los últimos años han
huido de las insoportables tasas de paro. Muchos doctores, graduados
y becarios que han emprendido el camino del exilio en busca de
mejores perspectivas para desarrollar su labor consideran el retorno
a corto plazo un mero espejismo.
¿Será
posible que biólogos como Ciro Cabal puedan algún día desarrollar
sus proyectos en laboratorios españoles? Como expone el científico
Mariano Barbacid, el problema no es la salida al extranjero de
científicos españoles para completar su formación. Lo grave es no
saber cómo recuperarlos y dejar escapar irremediablemente su
talento. Si la ciencia española quiere jugar en primera división
necesita incrementar de manera urgente los recursos económicos y
cuidar la cantera.
El
País, 5/4/2016